Mientras el mundo se recupera de los efectos de la pandemia Covid-19, China se perfila como el principal actor del mundo pluripolar, ampliando sus horizontes geopolíticos hacia el Medio Oriente y abriendo nuevamente sus fronteras para atraer turistas y promover inversiones extranjeras.
En diciembre de 2022, el presidente Xi Jinping inició una gira que le llevó a Arabia Saudita, mientras que su canciller, Qin Gang, visitó Egipto. En su primera visita oficial a Riad desde 2016, Xi firmó un acuerdo de asociación estratégica integral con el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman.
#China y Arabia Saudita afirmaron hoy la importancia de mantener la estabilidad en los mercados de petróleo mundiales ante la crisis energética global, un compromiso alcanzado en el marco de una visita del presidente chino Xi Jinping pic.twitter.com/PB5uGH776x
— Iramsy Peraza (@IramsyteleSUR) December 9, 2022
«Xi no sólo asistió a la primera Cumbre China-Estados Árabes y a la Cumbre China-CCG (Consejo de Cooperación del Golfo), y realizó una visita de Estado a Arabia Saudí, sino que también sostuvo reuniones bilaterales con cerca de 20 líderes árabes», dijo Wang Wenbin, portavoz de la diplomacia china, quien consideró esta gira como la acción de más alto nivel con el mundo árabe desde la fundación de la República Popular China.
#China y los países árabes dan pasos sólidos para fortalecer la cooperación con su primera cumbre de alto nivel en Arabia Saudita, con motivo de la visita del presidente chino Xi Jinping a ese país. Esperan fortalecer coordinación en medio de dinámica global cambiante pic.twitter.com/VnW3SbV3aC
— Iramsy Peraza (@IramsyteleSUR) December 9, 2022
Aunque el interés de China en Arabia Saudí no es nuevo, esta visita de Xi recalca el valor real de esta alianza estratégica, justo cuando los ojos del mundo estaban puestos en Europa por la guerra en Ucrania, así como en la tensión entre Beijing y Washington en torno a Taiwán.
Esto demuestra que la presión de China en la geopolítica global puede venir de lugares mucho más determinantes para la economía global, como puede ser el Golfo Pérsico, con cifras importantes que han sido pasadas por alto por los políticos europeos y estadounidenses que suelen desviar su atención de estos “amigos incómodos”.
Volumen comercial
Un elemento importante en el panorama internacional es que, actualmente, China es el mayor consumidor mundial de ‘commodities’ y Arabia Saudita es el exportador número uno de petróleo.
En 2022, el volumen comercial entre ambos países llegó a los 97.260 millones de dólares, un incremento del 37,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior. El volumen del comercio chino con el resto del mundo apenas creció un 11% en dicho lapso.
Asimismo, de los 28.000 millones de dólares invertidos por China en el exterior, un 20% se destinaron a Arabia Saudita, al tiempo que las inversiones saudíes en China también son de las más elevadas que tiene el país árabe en el extranjero.
"Los superávits en las cuentas corrientes de Rusia, China y Arabia Saudí han alcanzado niveles récord. Pero ahora estos superávits no se están transfiriendo a los tradicionales activos en dólares de reserva", afirma Zoltan Pozhar, director general del banco suizo Credit Suisse. pic.twitter.com/66WArgMjP5
— MV (@Mision_Verdad) January 23, 2023
En estas reuniones bilaterales se firmaron 34 acuerdos de inversión en transporte, infraestructura, logística, industria médica, energías renovables, energía fotovoltaica, el uso pacífico de la energía nuclear, la inteligencia artificial, el desarrollo de las nuevas tecnologías y el impulso de la innovación en el sector energético, detalló el portal especializado Público.
Relaciones con Egipto
Durante su estadía en Riad, Xi se reunió con el presidente de Egipto, Abdulfatah al Sisi, encuentro en el que destacó que el panorama internacional “está experimentando cambios profundos y complejos, lo cual ha vuelto aún más evidente la importancia estratégica y global de las relaciones entre China y Egipto”, citó el Ministerio de Relaciones Exteriores del país asiático.
China también mostró su disposición a profundizar la cooperación en la construcción conjunta de la Franja y la Ruta con Egipto, e implementar proyectos de cooperación como la Zona de Cooperación Económica y Comercial China-Egipto en Suez. De esta forma, el gigante asiático se prepara “para importar más productos de alta calidad de Egipto y ampliar la cooperación en materia de inversión y financiamiento, producción conjunta de vacunas y navegación espacial, entre otros campos”.
Entretanto, el canciller Qin Gang, celebró recientemente una reunión en El Cairo con el secretario de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, en la que acordaron avanzar en la implementación del consenso alcanzado en la primera Cumbre entre China y los Estados Árabes, informó Telesur.
Pleased to attend highly level discussions between SG of LAS and Chinese Minster Foreign affairs @AmbQinGang which focused on future cooperation in light regional and global challenges.@MFA_China pic.twitter.com/Lk4SBJOwBl
— خالد منزلاويkhaled Manzlawiy (@khaledManzlawiy) January 16, 2023
Crecimiento post Covid-19
Luego de mantener una rigurosa política sanitaria de “Cero Covid” para frenar la propagación del coronavirus, China finalmente abrió sus fronteras a los turistas extranjeros el pasado 8 de enero, al tiempo que posibilitó la salida de los viajeros chinos al exterior, quienes antes de la pandemia gastaron 280.000 millones de dólares fuera del territorio chino.
Esta apertura ha impulsado el aumento del precio de los ‘commodities’, -de los que China es su principal consumidor- en especial los metalíferos: el valor del cobre trepó a 9.000 dólares la tonelada por primera vez desde junio del año pasado, mientras que el hierro aumentó 50% la tonelada en comparación con julio de 2022.
Estos y otros indicadores señalan que la economía china, la segunda del mundo, calculada en 17,6 billones de dólares, lo que representa el 18% del Producto Interno Bruto (PBI) global, crecería este año entre 6% y 8% anual.
JPMorgan, Standard Chartered win approval to expand in China https://t.co/u7teI5QvZJ pic.twitter.com/fQ8sNguixL
— Reuters (@Reuters) January 19, 2023
Las previsiones del crecimiento se basan en la extraordinaria capacidad de gasto de sus consumidores, que en la etapa pre-pandemia representaron la tercera parte del PBI mundial con 7 billones de dólares. De acuerdo a la firma JP Morgan, estos consumidores disponen ahora de un ahorro “forzado” por 3 años de pandemia, que asciende a 830.000 millones de dólares.
Economía estable
Otro elemento favorable es que, en contraste con las economías de Estados Unidos (EE.UU.) y Europa, azotadas por la inflación y el fantasma de la recesión, China tiene condiciones de plena estabilidad macroeconómica.
El Banco del Pueblo de Beijing (Banco Central) preveía una tasa de inflación de 3% anual a comienzos de 2022, pero el nivel efectivo del IPC (Índice de Precios al Consumidor) alcanzó 2% en 2022.
Al mismo tiempo, el total del comercio exterior (la suma de importaciones y exportaciones), alcanzó un récord histórico de 6 billones de dólares el año pasado, récord histórico absoluto; y las cifras de enero indican un nivel todavía superior en 2023.
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, visitará China el 5 y 6 de febrerohttps://t.co/c2x0a0jNp3
— Diario El Heraldo (@diarioelheraldo) January 19, 2023
Estos números explican por qué el peso creciente de China en la economía mundial se ha convertido en un elemento crucial en términos geopolíticos, y los posibles intentos de Washington de establecer puntos de encuentro con su más cercano competidor, con el próximo viaje del Secretario de Estado Anthony Blinken al país asiático.
Sin embargo, actualmente la atención se centra en la resolución del conflicto bélico en Ucrania, que ya cumplió once meses, donde resulta cada vez más importante el papel de China como mediador y cabeza de la reconstrucción de los territorios devastados por la guerra.