El viceministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Freddy Mamani Machaca, consideró el jueves que la posición del subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos (EE.UU.), Brian Nichols, podría entenderse como una transgresión al principio de «no injerencia» entre los países.
“No es común un pronunciamiento como el del Subsecretario, porque podría entenderse como una transgresión a los principios de respeto mutuo y no injerencia que rigen las relaciones entre los Estados en general y en particular la relación bilateral entre Bolivia y Estados Unidos”, dice el viceministro en un comunicado de la Cancillería boliviana.
Nichols manifestó su supuesta preocupación por «los reportes de violencia en Bolivia» desde el pasado 28 de diciembre, cuando fue detenido el opositor Luis Fernando Camacho, por su vinculación en el golpe de Estado contra el expresidente Evo Morales en 2019.
«Exhortamos a todos los bolivianos a dialogar por la paz y la unidad y respetar los derechos humanos, que incluyen el debido proceso y la libertad de expresión, establecidos en la Constitución Política de Estado (CPE) y convenciones internacionales», manifestó Nichols en un mensaje en Twitter.
Nos preocupan los reportes de violencia en Bolivia desde 28 Dic. Exhortamos a todos los bolivianos a dialogar por la paz y la unidad y respetar los derechos humanos, que incluyen el debido proceso y la libertad de expresión, establecidos en la CPE y convenciones internacionales.
— Brian A. Nichols (@WHAAsstSecty) January 12, 2023
Mamani aseguró que “las palabras del Subsecretario expresan la preocupación internacional que se produjo por los hechos de violencia protagonizados por grupos de choque afines al Comité Cívico de Santa Cruz que incendiaron la Fiscalía de esa ciudad y atacaron otras instituciones públicas e incluso asaltaron la vivienda del ministro Montaño”.
“La investigación del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) identificó a esos grupos parapoliciales y recomendó su desactivación”, señala.
La Policía activó un operativo para trasladar a Camacho desde Santa Cruz a La Paz, donde un juez dictó cuatro meses de detención preventiva en una cárcel de máxima seguridad.
Tras la captura de Camacho y la decisión de la Corte se desataron las protestas de los partidarios del golpista, en los que hubo daños de consideración a varias instituciones públicas además de decenas de detenidos.