En medio de una visita no anunciada a Ucrania, el presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Joe Biden, prometió un nuevo paquete de ayuda militar a Kiev valorado en 500 millones de dólares, una acción que apunta a la prolongación del conflicto con Rusia.
«Hoy, en Kiev, me reuniré con el presidente Zelenski y su equipo para una discusión extensa sobre nuestro apoyo a Ucrania. Anunciaré otra entrega de equipos críticos, incluidas municiones de artillería, sistemas antiblindaje y radares de vigilancia aérea», refería horas antes de su llegada a Kiev.
Biden también informó que aplicará sanciones adicionales a Rusia, a pesar del impacto económico que han tenido sobre casi toda Europa y, en especial, en los mercados energéticos el último año.
En esta misma línea, Biden viajará a Polonia en donde espera reunirse con los líderes del flanco oriental de la Organización del Tratado del Atlántixo Norte (OTAN) para evaluar el transcurso del conflicto con Rusia, confrontaciones promovidas y apoyadas por el mismo organismo, al no llegar a un acuerdo con Moscú sobre garantías de seguridad hace más de un año.
El miércoles, el mandatario estadounidense sostendrá un encuentro con el grupo llamado los Nueve de Bucarest, integrado por Bulgaria, República Checa, Estonia, Polonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania y Eslovaquia. «Son los aliados de la OTAN que están, literalmente, en la primera línea de nuestra defensa colectiva», explicó John Kirby, portavoz de la Casa Blanca.
Zelenski a los pies de Biden
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski expresó que «los resultados de la reunión de hoy con Biden tendrán reflejo en el campo de batalla».
Ambos jefes de Estados realizaron un recorrido por el Monumento a los Caídos en Kiev, más tarde instalaron en el Paseo del Coraje, una placa con el nombre de Joe Biden y las fechas tanto de su primera llamada telefónica a Zelenski, como de su visita a la capital ucraniana.
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