El Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) de Perú confirmó un nuevo derrame de petróleo sobre el mar de Lima proveniente de la refinería La Pampilla, operada por Repsol.
La transnacional había sido la causante de un primer y grave vertido de crudo el pasado 15 de enero. El mismo se produjo mientras los técnicos trataban de reparar la avería anterior.
El jefe del Estado Mayor de la Comandancia de Operaciones de Guardacostas, Jesús Menacho, señaló por su parte que el derrame fue relativamente más pequeño que el anterior y controlado por las barreras de contención, elementos absorbentes y skimmer dispuestos en la zona.
Menacho negó que el crudo haya afectado el litoral de Lima, pues las autoridades realizaron la inspección correspondiente.
El presidente de Perú, Pedro Castillo señaló a Repsol como el único responsable del desastre, a la vez que dejó claro que revisaría el contrato suscrito entre la empresa y el Estado.
