El número de muertos a causa de las fuertes lluvias que azotan el estado de Pernambuco, en el noreste de Brasil, superó este martes la barrera de los 100 muertos, luego que los bomberos encontraron la tarde de este martes seis cuerpos para alcanzar la cifra de 106 personas fallecidas, informó Defensa Civil.
Además, el ente indicó que otras 10 personas se encuentran desaparecidas, las cuales están siendo buscadas con la ayuda de «perros detectores y aeronaves».
Asimismo, más de 400 bomberos trabajan para localizar a los desaparecidos, en su mayoría soterrados bajo el lodo que arrasó barrios enteros en la región metropolitana de Recife, capital de Pernambuco.
Producto de las fuerte inundaciones, más de 6.000 personas perdieron sus hogares y 24 municipios de este estado se han decretado en situación de emergencia por las lluvias. Varias campañas de donaciones se han puesto en marcha para ayudar a los afectados.
El presidente brasileño, el ultraderechista Jair Bolsonaro, sobrevoló la región el lunes y lamentó las muertes. Su gobierno habilitó un crédito de 1.000 millones de reales (unos USD 212 millones al cambio) para reforzar la asistencia humanitaria y reconstrucción, a cargo de las autoridades locales.
Bolsonaro fue criticado por afirmar que «lamentablemente estas catástrofes ocurren» en un país «continental (como Brasil)».