Al menos 1.500 personas han sido arrestadas hasta este lunes por fuerzas de seguridad del Estado brasileño, tras los recientes actos violentos registrados en la nación suramericana.
Flávio Dino, ministro de Justicia y Seguridad Pública, precisó que 209 personas fueron detenidas en flagrancia y otros 1.200 extremistas ya están siendo juzgados por el asalto a las sedes del Congreso Nacional, la Presidencia y el Supremo Tribunal Federal (STF).
Lo que ha sido calificado como un atentado a la democracia por distintos países de la región, también ha dejado daños irreparables a las estructuras estadales. Obras de artes, piezas históricas y mueblería fueron destruidas y sustraídas por los bolsonaristas, quienes no aceptan la derrota electoral.
Un acontecimiento muy parecido a lo ocurrido en enero de 2021 en Estados Unidos (EE.UU.), cuando un grupo de seguidores de Donald Trump asaltó el Capitolio.
Los detenidos brasileños permanecen en el gimnasio de la Academia Nacional de la Policía Federal para rendir testimonio.
“Se considera flagrante y se tomarán medidas. Corresponderá al Poder Judicial dar una respuesta final sobre lo que sucederá con ellos. Algunos se someterán a una audiencia de custodia; otros podrán, eventualmente, recibir el beneficio de la libertad provisional”, expresó Dino, durante una conferencia de prensa.
Más temprano, el interventor federal designado por el presidente Lula da Silva, Ricardo Cappelli, confirmó que el campamento instalado frente al cuartel general del Ejército en Brasilia, donde se llevaron a cabo la mayoría de los arrestos y detenciones, quedó desocupado.
El ministro Dino también informó de la llegada de 500 hombres a Brasilia, provenientes de otras fuerzas de seguridad de varios estados para integrar la Fuerza Nacional, que actualmente cuenta con poco más de 300 agentes.
Lula firmó el domingo un decreto con el cual, la Policía Militar, la Policía Civil, la Policía Criminal y todas las fuerzas de seguridad pública ahora responden al gobierno federal.
El documento permite que las Fuerzas Armadas actúen para restablecer el orden público.
“Este contingente tiene como objetivo apoyar las medidas que estamos adoptando a lo largo de esta semana, especialmente en la protección de la Explanada, Praça dos Três Poderes. Y, con eso, el contingente de policías del Distrito Federal pueda volver a sus funciones normales”, destacó el ministro.